Si observamos detenidamente las características de los pacientes que fueron atendidos en el Hospital Civil a principios del siglo XX, y comparamos éstas con los problemas de salud y las causas de muerte del resto de alcalainos que no fueron a él, entenderemos que el concepto de hospital y las expectativas que los ciudadanos tenían de la asistencia allí prestada, era muy diferente del concepto que tenemos hoy día de la atención hospitalaria.
En 1900 ingresaron en el hospital 79 pacientes, con una media de 6 pacientes por mes, siendo agosto el mes en el que más pacientes ingresaron (12 pacientes). Esta mayor incidencia de ingresos hospitalarios en el verano se mantiene constante durante al menos las tres primeras décadas del siglo, y coincide con una mayor mortalidad estival de los habitantes de todo el municipio.
Sin embargo no existe esa misma sintonía en los datos sobre la edad y el sexo de los pacientes del hospital, que contrastan grandemente con los datos en el conjunto del municipio.
En 1900 hubo una elevada mortalidad infantil en Alcalá, pues un 51.5% de los fallecidos eran menores de 5 años, lo que refleja la gran cantidad de niños que enfermaban. Sin embargo, ese año no ingresó en el hospital ningún paciente menor de 5 años.
Del mismo modo es llamativa la proporción del sexo de los pacientes, que reflejan una baja tasa de ingresos hospitalarios de mujeres respecto a los ingresos de los hombres.
Así pues, mientras que los datos de mortalidad nos indican que ambos sexos enferman casi por igual (52.8% de hombres fallecidos en Alcalá en 1900 frente a 47.2% de mujeres), solo un 18.9% de los pacientes ese año eran mujeres, frente al 81.1% de pacientes hombres.
En cuanto a las estancias hospitalarias, si bien no tenemos datos de la morbilidad hospitalaria, hemos podido saber, por los libros del Hospital, que el 40.5% de los pacientes ingresados entraron heridos, frente al 59.5% de enfermos.
Las estancias en el hospital eran inferior a 15 días en un 50% de los casos, y en un 75% inferior a 25 días. No obstante, un 10% de los pacientes permanecieron ingresados en el hospital entre 2 y 5 meses.
Para averiguar las causas de muerte de los 18 pacientes que fallecieron ese año en el Hospital (que representan el 22.8% del total de pacientes ingresados) hemos buscado en los libros de mortalidad del Registro Civil, habiendo encontrado las causas de muerte de 16 de ellos. Respecto al resto de pacientes que fueron datos de alta del hospital por curación o mejoría, no tenemos información de sus patologías.
A continuación mostraremos las causas de muerte de los fallecidos en el Hospital ese año, codificadas según la lista abreviada de la primera Clasificación Internacional de Causas de muerte y enfermedades (CIE), conocida como la Clasificación de Bertillon, y que se mantuvo vigente hasta 1930.
Según la Clasificación de Bertillon, la rubrica numero 34 de la clasificación abreviada se denomina “Otras Enfermedades” e incluye 78 rubricas diferentes correspondientes a la clasificación detallada de esa misma CIE. Por lo tanto, al ser un cajón de sastre en el que se incluían otras muchas enfermedades, no es de extrañar que sea la causa más frecuente tanto en los fallecidos en el hospital como en el resto del municipio. Sin embargo, no ocurre lo mismo con las otra rubricas.
En correspondencia con la elevada mortalidad infantil, las primeras causas de muerte en el conjunto de Alcalá son las diarreas en menores de dos años, la neumonía, difteria, debilidad y vicios de conformación y las bronquitis agudas. Estas enfermedades no causan ninguna muerte en el hospital ese año, pues como vimos anteriormente, no ingresó ningún niño menor de 5 años ese año.
Para terminar con esta breve caracterización de los pacientes del Hospital Civil en 1900, hablaremos de sus localidades de procedencia y profesiones.
El 58,23% de los pacientes ingresados en el hospital vivían en el casco de Alcalá la Real y un 39,2% procedían de las aldeas o municipios cercanos. Este dato sin duda corresponde con una mejor accesibilidad al hospital de los residentes en el casco de Alcalá, pues si atendemos a la distribución de la población, precisamente a principios de siglo era inversa a los datos obtenidos. A principios del siglo XX sólo un 40% de la población residía en el casco de Alcalá, en tanto que el otro 60% vivían dispersos en el campo y las diferentes aldeas.
De entre las aldeas, fueron en primer lugar Charilla, seguida de Mures y CanteraBlanca las que más ingresos hospitalarios ocasionaron.
Resulta llamativo que Santa Ana, siendo la aldea más cercana y que ese año en el conjunto de la mortalidad del municipio ocupa el segundo puesto en cuanto al numero de fallecidos, sólo originó un ingreso en el hospital. Dado que los niños no ingresaban en el hospital, podríamos pensar que ese dato corresponde con una mayor mortalidad infantil en la aldea, sin embargo, los datos no avalan esta hipótesis, por lo que habrá que buscar causas de otra índole. De hecho, en Santa Ana, en 1900, hubo una menor mortalidad infantil que en el resto del municipio, pues los fallecidos menores de 5 años representaron el 37,8% mientras que en el conjunto del municipio fueron el 51.1%.
En cuanto a las profesiones, éstas corresponden con las propias de las personas que a principios del siglo eran hombres (un 81% de los pacientes ingresados) y pobres. Así, la mayoría se dedicaban al campo (64.1%), mayoritariamente jornaleros, o no tenían una oficio reconocido y en el campo de ocupación las religiosas registraron «pobre» (20%). Las dos siguientes ocupaciones más frecuentes eran zapateros (7%) o albañiles (2.5%).
Enhorabuena Ana, un trabajo impresionante que seguro dará muchos más frutos.
Me quedo con con los datos que has obtenidos sobre la gran mortalidad infantil sin ingresos en el hospital y la diferencia de ingresos entre hombres y mujeres en el hospital, que CURIOSO….
Gracias Mª Jesús. Sin duda el Hospital Civil, como otros hospitales de beneficencia de la época no tienen nada que ver con el concepto que hoy tenemos de la asistencia hospitalaria y la cartera de servicios de los hospitales actuales. La elevada mortalidad infantil a principios del siglo XX no por conocida deja de ser impactante, y ha sido una parte de los datos que más me ha impresionado, de hecho será probablemente el tema de la próxima entrada. En cuanto a la diferencia de sexos … sabemos que aún hoy existe diferencias entre sexos en muchos aspectos, pero nunca me habría imaginado que en este aspecto, el de atención a la salud, fueran tan marcados en esa época.